Extraños - Foto de A.C.P.
Sketch – The Modern Jazz Quartet
Observado
A veces, solo a veces, y ésta fue una de ellas, se produce un hecho, digamos extraño y digno de ser mencionado.
No vayáis a creer que es por siempre y en todo lugar, pero tengo la sensación de ser observado, no espiado, por seres extraños, ya sabéis, eso de estar en una estación o lugar público, tener ese escozor en la espalda, producto de una mirada más penetrante en ella, de lo educadamente correcto.
Te giras al sentirte incómodo y lógicamente no ves nada extraño, todo el mundo va a lo suyo y apenas si te hacen caso, con lo mucho que yo puedo dar de sí, pero ese es otro tema del que no hablaré ahora.
El misterio se queda entre ceja y ceja, sin saber adjudicar la mayoría de las veces la fuente de la inquietud producida con esa sensación extraña en mi cuerpo.
Por suerte o desgracia, ahora vamos siempre equipados con una cámara capaz de grabar todo lo que pueda suceder a nuestro alrededor.
Con lo cual ya nada se nos puede escapar, por extraño que nos parezca. Siendo un día de aniversario poco celebrado, no suele gustar a los amantes de los tiempos imperiales, la susceptibilidad estaba despierta y presente. Al final los vi.
Eran pequeños con sus ojillos enrojecidos a saber, por qué producto alucinógeno, ilegal por supuesto, que habían tomado previamente a tropezarme con ellos.
Todo en ellos era pequeño, diría que incluso con tendencia a lo deforme y con pocas señales de poder saber a qué especie pertenecían, para eso ya habrá expertos, pero estaban ahí bien atentos a mis movimientos, menos mal que no me siguieron y enseguida pude dejarlos atrás y con ellos se quedó mi quemazón en la espalda.
Barcelona, 14 abril 2023
Esa sensación de ser observados es persistente.
ResponderEliminarCuando me la obsequiaron dijeron que era un cactus de bajo cuidado yo me puse feliz, por fin una planta que no me moriría, se puso regordeta y preciosa, un día se me ocurrió tocar ligeramente en la parte alta y trono, no sabía que estas niñas almacenan agua. De los cactus, la Mammillaria Hahniana es la que más me gusta.
Siempre se da, pero no siempre se percibe. ;)
EliminarPor si acaso a este par, ni los acaricio.
Bueno, al menos tienes una preferida.
No me extrañaría que pudiera ser.
ResponderEliminarHay más seres y universos que los que vemos.
Saludos.
Todo es posible, en la viña del...
EliminarTenlo por seguro.
Saludos.
Desde el Gran Hermano somos permanentemente observados, si nos preocupáramos nos volveríamos locos.
ResponderEliminarSaludos
Ya nos lo mostró bien Orwell.
EliminarCreo que locos lo estamos todos un poco.
Saludos.
Probablemente haya más ojos de los que nos pensamos que observen nuestros movimientos. No soy proclive a la paranoia pero algunas veces también he sentido la picazón de miradas que no he alcanzado a situar. En estos tiempos de extremo control sobre la ciudadanía en general y cada uno de los individuos en particular acaso el cogote, por ejemplo, o la rabadilla, quién sabe, estén desarrollando sistemas de autodefensa y no solo por el herpes zóster.
ResponderEliminarCada vez están montando más cámaras de seguridad, o eso nos dicen.
EliminarEstaría bien tener un detecto de miradas indiscretas.
Luego está el que se te queda mirando y no te ve, ha detenido la mirada para enfocar sus pensamientos (yo misma) una planta monísima con buena melena y sobre todo una narración impecable. Abrazos
ResponderEliminarPuede ser que se les quede la mirada perdida y uno esté en su ángulo de visión. Gracias Ester. Abrazos.
Eliminar¿Realidad o fantasía? Vete tú a saber. A lo mejor el observado también había ingerido algún producto que estimulaba la imaginación, je, je.
ResponderEliminarUn saludo.
¿Chi lo sa? Uno nunca sabe a ciencia cierta que ocurre a sus espaldas.
Eliminar;)))
Un saludo.
Me pasa como con tu anterior escrito, en el que me quedé con la sensación de que sabías algo que otros desconocíamos y me respondías que la evidencia estaba ahí y que era cuestión de fijarse. O a mí no me mira nadie por la espalda, como a ti, o me falta sensibilidad, o tengo que volverme más observador, o asumo que es mi deseo quedarme en mi habitual modo «despistado».
ResponderEliminarUn abrazo.
Todos siempre sabemos más de lo que decimos, de lo contrario, pues como que no tendría gracia. ¿Verdad?
EliminarIgual abusas de despistar al personal. ;)))
Un abrazo.
Tots hem tingut la sensaciò de ser observats alguna vegada. Hem pensat que era una paranoia nostra . Però avui l.Alfred ens posa mùsica de jazz per ajudar.nos a pensar i la foto d.un cactus. Alerta ! Potser no son maníes ! Potser l.espía el tenim a casa en forma d.un discret cactus. ! Deu ser una espècie vegetal de agent secret ? Treballa pel CNI ? Ves a saber ! Jo a partir d.ara pendré precaucions , ! No se sap mai que pot passar ! Gràcies Alfred , potser amb aquest escrit tù també ens vols dir alguna cosa. Ho averiguarem !............Pepi.
ResponderEliminarCrec que a tots ens passa de vegades, sentir-se observat, faràs bé en vigilar un pèl més. ;))))
EliminarMerci, Pepi!!!
Muy bueno, me has tenido atenta a ver que podían ser esos seres extraños minúsculos que observan y pican ... Interesante , no me extrañaría que comenzara una nueva invasión de seres extraños, no extraterrestres es diferente. Un abrazo , feliz finde.
ResponderEliminarMuchas gracias Campirela. A lo mejor los mosquitos tigres son cada vez más sofisticados. ;)
EliminarUn abrazo y buen finde.
No me extrañaría que fuera real esa sensación de que alguien te observa. A mi desde luego me daría bastante miedo si no veo al sujeto, igual que si viera a seres extraños, :))).
ResponderEliminarMuy agradable tu relato.
Un abrazo Alfred, y buen fin de semana.
No siempre podemos identificar tan claramente, quién es el observador clandestino. ;)))
EliminarMuchas gracias Elda.
Un abrazo y feliz finde.
Mientras solo te miren y no te toquen, tu tranquilo.
ResponderEliminarSi te tocan, prepárate porque pinchan que desinflan.
¿Y si me atacan con telepatía?
Eliminar¡Espero que no!
En paralelo y simultáneo la vida y sus protagonistas ocurren
ResponderEliminarBuen finde 😊
Ocurren, se suceden y nos despistan o distraen, todo junto, sin mezclar pero bien agitado.
EliminarFeliz finde. ;)
Si son los de la fotografía y vienen en maceta no me haría mucho problema! Un abrazo Alfred!
ResponderEliminarEstos simplemente son los que provocaron la alucinación descrita. ;)
EliminarUn abrazo, maría cristina.
T'has de sentir afortunat que estiguessin plantats i que, aparentment, no tinguessin una manera de seguir-te. Una topada amb ells i ja et veig a urgències.😱
ResponderEliminarDe vegades sóc jo la que miro insistentment a la nuca d'algú... amb pocs resultats, també ho he de dir.🤭
M'has tret un somriure, avui.😊
Aferradetes, Alfred.
Intento imaginar-ta amb la mirada fixa i insistent sobre els elements de la teva vida que consideres altament neguitosos. ;)))
EliminarPetonets, sa lluna!!!
Un alivio, darse cuenta de que fueran un par de cactus inofensivos mientras no los tocaras 😊
ResponderEliminarExcelente manera de mantenernos atentos a tu narración.
Abrazos.
No creas, estos son los modelos usados que me inspiraron, los reales eran dos tipos, con gabardinas con el cuello subido, a pleno día de una jornada primaveral altamente soleada y calurosa, que no me quitaron el ojo de encima, siguiéndome en diversos actos y por diversos medios, lo más preocupante cuando me siguieron andando por un paseo abarrotado de turistas y en ningún momento los pude despistar, a pesar de mi disfraz de maleta con ruedas o de americano con sandalias y calcetines, con sombrero mexicano de altos vuelos, que por aquí se vende mucho.
EliminarGracias Sara.
Besos.
Y quién no es hoy día observado amigo Alfred?
ResponderEliminarPor si no lo sabes el cactus que tienes y te mira con bellos ojos se llama: Espostoa lanata.
Un abrazo amigo.
Creo que nadie está a salvo de ello.
EliminarSí alguien me lo podía decir de forma fehaciente, eres tú, lo cual me deja más tranquilo, pues no deja de ser una simple planta de adorno. ;)
Un abrazo, amigo Juan.
No dudo que sea cierto. Estamos observados continuamente.
ResponderEliminarAparte de esa sensación producida por algún voyeur, tenemos la proliferación, diría que excesiva, de cámaras denominadas de seguridad.
EliminarEs verdad.,.. tienen vidilla y es que a veces, se ven caras en cualquier parte :)
ResponderEliminarMuy ocurrente!
¡Pues claro!, Por cualquier parte y lugar. ;)
EliminarMuchas gracias.
Quizás solo querían celebrar ese gran aniversario y no encontraban con quien :))
ResponderEliminarUn beso.
Pudiera o pudiese ser tal como dices, y caí en una gran confusión, víctima que el calor debido al tiempo y la aglomeración humana, provocaran en un ser tierno y sensible, como de natural soy.
EliminarGracias. ;)
Un beso, Carmela.
Jajaja debió ser eso.
EliminarOtro beso, tiernecito 😘
¡Por supuesto!
EliminarNo lo pongas en duda.
Gracias, otro para ti. ;)
Sabes? Cuando era pequeño, en el colegio. No me acuerdo en qué asignatura era, nos dijeron una cosa muy curiosa y me acuerdo como si fuera ayer: si te quedas mirando fijamente en la nuca sin apartar la mirada a alguien que esté viendo un escaparate o en la iglesia (?) o cualquier otro sitio, al cabo de un ratito verás que esa persona se girará para ver quien le observa. Y funcionaba O_O
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Alfred :)
La verdad es que es bien curioso que te contaran eso. No sé sin con el tiempo de observación de un escaparate, me dará tiempo de sacar conclusiones, en cuanto en una iglesia, con tanto sentarse, levantarse, arrodillarse y volver a empezar, tengo claro que seguro que no.
EliminarUn abrazo fuerte, Gumer. ;)
Si no observamos la vida no vivimos. Muy importante no tocar a veces, pongamos atención a la advertencia, en este caso al cactus que nos mira y nos dice que prohibido tocar. Feliz fin de semana Alfred,.Un abrazo
ResponderEliminarCierto Carmen, hemos de estar atentos a nuestro alrededor y vigilar nuestras espaldas, nunca se sabe.
EliminarBuen finde, un abrazo.
Aquí estoy de nuevo amigo Alfred. Después de una temporada llena de problemas de salud. Lo último fueron mis ojos y si alguien me observaba no podía saberlo, solo imaginarlo. Ahora no me importa, es una suerte ver y que te vean.
ResponderEliminarUn abrazo.
Una muy buena noticia Airblue. Es una buena señal de tu recuperación.
EliminarLa verdad es que poder ver y que te vean es una buena cosa.
Un abrazo.
Qué razón tienes en lo que dices. Siempre llevamos el móvil para captar cualquier cosa que nos llame la atención. Me gusta observar, pero también retenerlo, y por eso me gusta capturarlo. Así que todos estamos siendo observados jajaja es cierto.
ResponderEliminarMe gustó estar en tu casita, Alfred, leerte, y ver la imagen que compartes, un placer.
Besos y feliz fin de semana.
Gracias María. Es parte importante y diría que ya indispensable de nuestro equipamiento.
EliminarYa sabes, sé bienvenida, ponte cómoda y disfrutemos de la charla. ;)
Besos y feliz finde.
Tu texto es inquietante, y describe con exactitud esa sensación que a veces nos acomete.
ResponderEliminarY creo y deseo que haya cosas aún que no puedan ser registradas en el móvil... si no no existiría el misterio...no?
Besos!
Puede que te resulte inquietante, pero lo encuentro muy real.
EliminarEsa incomodidad existe y todos la reconocemos.
Besos, lunaroja.
Cuando se comprende una mirada se revela el misterio. Salud.
ResponderEliminarLo pequeño siempre nos observa, nos percatemos de ello o no.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Eso está bien, lo tendré en cuenta.
EliminarSaludos.
Están ahí, cada cual sabe quiénes son, qué quieren, qué buscan... siempre están, sólo a veces nos damos cuenta...
ResponderEliminarMe encantó, Alfred. Abrazo hasta vos.
Perdemos mucho sin mirar lo que de verdad nos rodea y puede hacernos cambiar el sentido de nuestros pensamientos.
EliminarMuchas gracias, carlos. Un abrazo sincero.
Esas observaciones me inquietan, a mi hija le encantan los cactus y tiene varios, cuando vaya a su casa no querré salir a la terraza para no sentirme observada. Muy bueno.
ResponderEliminarUn abrazo.
Si te inquietan para inquirir, considéralo algo bueno.
EliminarNo desperdicies la compañía de unos cactus, por qué algunos de sus congéneres sean algo chismosos. Muchas gracias.
Un abrazo, Conchi.
Realmente son inquietantes Alfred. :))))))
ResponderEliminarReconozco no haber sentido nunca esa sensación de saberse observado... Bien por carecer de méritos para ello... jajajjajajaja..., bien por "traérmela al pairo".
Abrazos.
Bueno, tampoco hay para tanto, poco pueden hacer los pobres, ahí plantados, Ernesto. ;))))
EliminarYa, y haces bien, pues seguro es por lo segundo.
Abrazos.
Um texto misterioso, mas que me interessou bastante.
ResponderEliminarAbrazos.
Gracias Céu, por tus palabras de apoyo, se bienvenida,
EliminarAbrazos.
Alfred, passa por mi blog. Gracias!
Eliminar¡Voy! ;)
EliminarEs una inquietante sensación, Alfred, suele suceder que a veces sentimos esa mirada clavada en la espalda.
ResponderEliminarUn abrazo.
Algo incómodo, cuando se produce, sí que es. El cuello te lo puedes rascar pero la espalda, es algo más difícil.
EliminarUn abrazo.
Esa extraña sensación de estar metidos en contra de nuestra voluntad en una mala película para distracción de un publico indiferente, ¿verdad?
ResponderEliminar¡Cierto! Es una buena forma de hacerlo ver. ;)))
EliminarGracias Beauséant.
Ud viejito esta en la gloria
ResponderEliminarLo felicito
En estos tiempos que vivimos, no sería nada extraño...
ResponderEliminarBuen texto.
Un abrazo.
Ya no nos extrañamos de nada.
EliminarMuchas gracias, Amalia.
Un abrazo.
Me he reído mucho con la imagen, gracias Alfred!!
ResponderEliminarY el relato, con la música perfecta para la narración, me ha gustado muchísimo, me voy con una sonrisa de oreja a oreja ji,ji.
Besos!!🌸
¿A qué son enternecedores? Gracias Ana.
EliminarEs lo mejor que me podías decir, que te vas de ese modo. ;)))
Besos.
Es más que posible. Los pequeños, siempre nos observan. Los otros, pequeños y grandes, a veces están y buscan captar; eso inquita o aguijonea la espalda. Los animales, especialmente de compañía, las plantas (no solo los cactus) miran y transmiten "algo".
ResponderEliminarEs bastante probable que, por creernos distintos, olvidamos o perdemos parte de esa mirada, incluido su dialogo.
¿Cómo ibas a escribir tu si no lo hubieras "observado"?
Un abrazo.
El hombre, como tal, desprecia bastante a todos los otros seres que habitan por el planeta. Hay que dejar constancia que, a veces, nos inquieren a su manera sobre nuestro comportamiento.
EliminarGracias, José Manuel.
Un abrazo.
Cactus no he tenido ni tengo.
ResponderEliminarSi hablamos de plantas que tengo para contar, no sé si nos observan, pero sí que responden cuando las cuido con dedicación, como la naturaleza, donde todo es armonía y trasmite sensación de bienestar.
Un abrazo Alfred.
Fue un regalo y dado lo poco ducho que soy con las plantas, es la mejor que me podían ofrecer, pues a pesar del tiempo transcurrido, veo que sobrevive.
Eliminar¿Igual esa mirada es para darme las gracias? ¡Ves a saber!
En la naturaleza todo suele estar equilibrado, bueno, menos nuestra presencia.
Un abrazo Ángela.
De sobrenatural, en mi vida corre poca cosa por no decir nada, pero esos ojillos sé que me miran de una forma curiosa e inquisitiva.
ResponderEliminarAquí hablo de esa sensación que produce estar siendo estudiado y analizado por la espalda.
Un abrazo, Julio D.
La sensación de que te observan es intrigante Alfred y tal y como lo cuentas me parece que de vez en cuando miraré haca atrás por si percibo algo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tan poco es plan de ponerse neurótico por ello, pero sí que más de uno te dirá que ha tenido esa sensación.
EliminarUn abrazo.
Es cierto, parece que siempre te sigue alguien, claro está, si vas por un sitio solitario.
ResponderEliminarMuy bueno, si señor. La música no la he podido escuchar, pues la enfermedad me ha atacado al oído, gusto y olfato. El que peor lo lleva es mi hijo pues le revienta que diga..."¡que"!
Un abrazo.
¡Vaya! No has estado de buenas, supongo que tu estado se irá revirtiendo poco a poco.
EliminarUn abrazo.
Hola Alfred!
ResponderEliminarExcelente narración. Si, a veces también he tenido esta impresión. A mí me ha dado por pensar en otra dimensión, pero esto me ha durado poco. Es cierto lo que dices!
Hola, Enric!
EliminarMuchas gracias. Es una impresión de la que nadie se salva.
Bueno, cada cual lo ve a su manera. ;)
A ver, el que se había fumado todo, comido setas alucinógenas y hasta esnifado pegamento, sin duda fuiste tú. Eso o estás de frenopático o ambas :))))))
ResponderEliminarVaya telita, jajajajajaj
Besines
Pero, pero, qué modales son estos para con un caballero de virtud intachable. PD!!!
EliminarQue sea compañero de centro con Terremoto Cracy, tendría que servirme de atenuante, no de agravante.
Ni que lo digas. ;))))))
Ración doble de besines. (ya sabes por qué) ;)))))
La mirada de esos cactus son intrigantes jaja. Besos.
ResponderEliminarYa te digo, los tengo ahí así, siempre mirando. ;)))
EliminarBesos.