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Viento Cargado
Un viento fresco, pegajoso por la humedad, sube por el paseo en cualquier tarde desolada en la que los habitantes lo contemplan desde sus ventanas cerradas, sin apenas apercibirse de él.
Los árboles inclinan sus ramas a modo de saludo obligado contra el amigo poderoso.
Como buen viento que se precie, recoge de todo lo que encuentra, ya sea hojarasca seca, arena del desierto, pequeños seres vivos cogidos en despiste o virus aprovechados en busca de un transporte gratuito.
Para luego repartir toda su carga equitativamente a su paso por donde va. Siempre y cuando tenga a quién dejarle cierta carga, pero cuando no hay receptor dispuesto pues...ahí se queda.
Por eso tras un largo periodo de calles vacías, nos encontramos con menos sufridas víctimas y algo más de nerviosismo.
Todos los ciudadanos, obedientes, responsables, recelosos, asustados, en suma confinados, esperan ansiosos el anuncio por las autoridades, (sanitarias por supuesto) de que el encierro ya se ha acabado, para salir como toros alocados a la conquista de... digamos todo.
Y así estamos, unidos, contentos, en la calle y con el viento tomando aire para soplar más fuerte y mejor cargado.
Barcelona, 29 Mayo 2020
Ojalá todo esto termine pronto y quede solamente en el recuerdo.
ResponderEliminarBesos y lindo fin de semana.
Esperemos que esta pesadilla acabe más pronto que tarde, pero hay que estar preparados.
EliminarBesos Paula y feliz finde.
Exactamente ese es el panorama.
ResponderEliminarBesos
Hemos de mejorarlo Tracy.
EliminarBesos.
Pintas el viento como metáfora del caos que está por regresar y me gustaria discutirte y me gustaria llevar razón. Abrazos
ResponderEliminarY yo deseo que la tengas.
EliminarAbrazos Ester.
Me gusta cómo describes al viento... pero tú ya sabes que cuando vengo a visitarte me quedo soñando con tu música y hoy con la foto... ese árbol que se ve me ha hecho recordar a mis calles de Buenos Aires y sus jacarandás... una maravilla para cerrar la noche.
ResponderEliminarUn beso.
Gracias AlmaBaires, son cosas que nos llevan la mente por otros derroteros, a ti te ha llevado a Buenos Aires y ahora tú me has hecho recordar el olor veraniego del barrio de Palermo ;)
EliminarUn beso.
Tal vez cuando se abran las talanqueras no vayamos a salir en estampida... sería fatal.
ResponderEliminarUn abrazo.
Por aquí, a medida que han ido abriendo el confinamiento, la escapada es más acusada.
EliminarUn abrazo.
La mayoría andábamos necesitados algún motivo para permitirnos bajar un poco la guardia. Luego están los que nunca la habían tenido levantada.
ResponderEliminarUn abrazo.
Estamos necesitados de un poco de vida algo social, pero el desmadre nos puede volver demasiado pronto al encierro.
EliminarUn abrazo.
Ojala esto terminara pronto pero no. Saludos amigo Alfred.
ResponderEliminarTodo tiene un fin, esperemos que pronto y feliz Sandra.
EliminarSaludos amiga.
El virus no es inteligente y se limita a hacer lo que tiene programado en sus genes. La otra parte, la componen los sufridos seres vivos bípedos y supuestamente inteligentes que no hacen lo que deben. ¿Quién tiene mas números de ganar la partida?
ResponderEliminarEsta vez, la respuesta no está en el viento como en su dia dijo Bob Dylan, sino en los niveles de gilipollez de la manada.
El virus es un ser que hace lo que le toca, al hacerlo jode la marrana al personal, pero para eso está. La segunda parte de la ecuación, le das una cualidad no demostrada de que es inteligente y falla todo. La naturaleza es una lucha constante por sobrevivir, cada uno con sus armas, pero si el hombre no usa las suyas correctamente, pues ya ves el resultado.
EliminarLa manada no es tal, es un rebaño y todo queda en manos de los pastores, más claro ¡Agua!
Me gusta cómo juegas con las palabras y la ironía ;)
ResponderEliminarSi para algo me ha servido este confinamiento es para darme cuenta que cada vez necesito menos vida social, pero de más calidad. Que necesito cada vez más de mi compañía y menos de la de las aglomeraciones, que disfruto más sentándome en mi jardín para desayunar mientras contemplo las flores o para leer o simplemente para escuchar el bello silencio que ir de tiendas o ir a un bar de poteo.
Si algo he descubierto con esta pandemia es que el ser humano sigue sin decepcionarme (con honrosas excepciones, claro está) y se comporta como lo está haciendo, con irresponsabilidad, con insensatez, con insolidaridad (y no hablo de la tonteria de aplaudir) y así nos va y así nos seguirá yendo.
Besines.
¡Ostras qué emoción!
EliminarDeja que me recupere un poco y seque mis lágrimas, para poder contestarte.
Besines.
Jajajajaja, serás gilimemo! Pero sabes te quiero ;)
Eliminar+Besines
;)))) Uno hace lo que puede.
EliminarLo sé y te correspondo.
Una vez superada la emoción, tras leerte por aquí, permite que te diga que todo eso ya sabes que es marca de la casa.
Tienes razón, salvo algunas pequeñas molestias, lo de estar confinado hoy en día no es una desgracia insalvable. En caso de tener casa fuera con jardín, incluso me alegraría de confinarme. Añoro ese silencio campestre en el que puedes ir reconociendo los miembros de la naturaleza que no son animales, según nuestro criterio.
Ya veo que estamos de acuerdo en cuanto a valoración de nuestro triste género humano.
+ Besines.
Yo salgo como toro salvaje, y alocado espero que pronto.
ResponderEliminarAún no he estrenado terraza... no me hace especial ilusión, me sabe a hora del patio en la cárcel.
Quiero ser libre de una vez.
Saludos.
De momento me he limitado a salir de paseo en la franja horaria que me corresponde por edad y la verdad es que lo visto no me agrada.
EliminarHay mucho de esa hora de patio y también de matones carcelarios.
Toma y yo, esperaremos.
Saludos.
Totalmente de acuerdo con Noxeus. El virus no tiene la culpa. La tiene la irresponsabilidad de los que deberíamos tener la capacidad de pensar.
ResponderEliminarLamentablemente, sobre solidaridad, parece que algunos han aprendido poco.
Siempre es tiempo de volver a Chet Baker y su trompeta.
Un abrazo.
Es lo que digo, estamos en una lucha constante y cada ser hace lo que le toca. Eso está en estado de valoración constante a la baja.
EliminarAl menos ponen unas notas armoniosas a todo este desaguisado.
Un abrazo Juan.
Poco a poco vamos levantando cabeza, espero que no la tengamos que agachar después.
ResponderEliminarUn abrazo, Alfred
La vamos levantando, cuando tendríamos que mantenerla agachada avergonzados. Así evitaríamos el rebrote que todo el mundo da por hecho.
EliminarUn abrazo Rita.
Qué ganas, y eso que los árboles siguen dejando sombras y brisas.
ResponderEliminarUn beso
Los árboles son testigos fieles generación tras generación de incompetentes bípedos, alocados en sus carreras a ninguna parte.
EliminarUn beso.
Tus palabras llevan mucha razón pero si todos fuéramos más consecuentes iría mucho mejor ..no estamos manteniendo una guerra cuerpo con cuerpo sino un ser super diminuto que nos tiene en jaque a todo un genero humano que vamos de lo que realmente no somos ..humanos !!
ResponderEliminarUn abrazo y feliz sábado.
En cómo nos comportemos a partir de ahora está el quid de la cuestión, no es agradable pero nos hemos de respetar mucho.
EliminarUn abrazo y feliz domingo Campirela.
No me gusta la nueva normalidad esta. Que de normalidad tiene bien poco.
ResponderEliminarLo que sí me gusta es el árbol de tu foto :) Si sabes su nombre me lo dices
Besos, Alfred
Hola Paloma, creo que no le gusta a nadie salvo los que tengan vocación de ermitaños.
EliminarCreo que se llama "Jacaranda"
Besos.
Pero importa controlar la ansiedad y visto lo visto, que además sigue ahí, más vale ser cautos que no miedosos. Luego, que cada cual saque sus conclusiones y sinceramente no espero que seamos más buenos. Si pasado un tiempo se demuestra que sí prometo corregir mi opinión.
ResponderEliminarExacto, hemos de actuar con cautela no con miedo, el miedo atenaza y bloquea. Hemos de movernos con sentido común, que como sabemos es el menos común de todos los sentidos.
EliminarMe gustaría que tuvieras que retractarte, creo que lo haríamos juntos.
Yo, de momento, prefiero no hacer esta llamada nueva normalidad. Veo a la gente y alucino, pensarán que lo del virus no va con ellos?
ResponderEliminarDe momento, una buena copa de vino y de fondo a Chet Baker.
Un beso, Alfred.
Esto de la nueva normalidad empieza a molestar de forma sublime. Supongo que hay de todo, lo que dices más mucho hartazgo por el encierro.
EliminarEso que no falte Carmela.
Un beso.
Maquillaje o eufemismo para presentar esta realidad... todos a la calle y el viento circundándonos. Bonita imagen y preciosa música... me gusta su cadencia.
ResponderEliminarMil besitos para ti, Alfred.
Vienen nuevos tiempos en los que nos miraremos de reojo y sonreiremos ocultos, desconfiaremos de todo pero lo celebraremos por todo lo alto para que se nos vea bien.
EliminarMuchas gracias Auroratris.
Mil besitos.
Preciosa entrada, muy realista!
ResponderEliminarLa imagen absolutamente bella, también me recordó a mi Buenos Aires como dice Alma,y a los jacarandás en flor...y al barrio de Palermo, cerca de casa de mi madre.
Un abrazo!
Gracias Lunaroja, una observación sincera de la realidad circundante.
EliminarSí tiene un aire, pero allá son más espléndidos y suena otra música. Un barrio agradable con terrazas bulliciosas donde el verano se siente mejor.
Un abrazo.
Mensaje tclaro nos dejas, a ver si somos capaces de calmar esos vientos tan cargados de virus en busca de transporte gratuito, que fatta nos está haciendo ya un poco de vida social. Seguiremos con prudencis por la cuenta que nos tiene.
ResponderEliminarEs árbol es pura belleza.
Buen fin de semana.
Cuídate.
Un abrazo.
No hemos de dejarnos llevar por el pánico ni tampoco facilitar las cosas. Con un poco de sentido común podremos volver a relacionarnos.
EliminarMuchas gracias, es un árbol hermoso que me trae buenos recuerdos.
Buen finde Laura
Un abrazo y a cuidarse, sin bajar la guardia.
Siempre necesitamos culpar a alguien de nuestros errores, incluso cuando queda por demás claro que los equivocados somos nosotros mismos.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Con que cada uno haga algo por sí y para los demás, que no lleve esto a un recrudecimiento de la pandemia, ya estaremos contentos.
EliminarSaludos y gracias José.
Buena metáfora, volando va el caos...
ResponderEliminarBesos.
Gracias Laura, espero y deseo que todo se pueda reconducir.
EliminarBesos.
Hola Alfred!
ResponderEliminarTengo ganas de que el virus, ya forme parte de la historia .
Hola Enric!
EliminarDe eso no te preocupes, ya está con letras de oro en la historia.
El viento arrastra lo que encuentra, él no tiene la culpa si es bueno o no.
ResponderEliminarAbrazos Julio.
Tardaremos en encontrar la normalidad en nuestros días, no es lo mismo, ni los mismos vientos, es tan solo un paso hacia adelante, pero queda mucho todavia por recorrer.
ResponderEliminarBesos.
Nos queda por recorrer y no sería bueno que todo sea exactamente como antes. Gracias María.
EliminarBesos.
El viento lo puede todo, incluso, hacer desaparecer a los nísperos.
ResponderEliminarSaludo desde la covidianididad.
Me gusta que hayas adivinado el título del próximo post ;)))
EliminarDejemos que el virus se vaya con viento fresco.
Un abrazo barcelonés.
Que bonito delineas tus letras
ResponderEliminarmi amigo Alfred,esperemos que
pronto termine todo esto y volvamos
a la normalidad, te cuidas siiii.
Besitos dulces
Siby
Muchas gracias Siby, esperemos que acabe pronto y bien. Demasiada gente se ha quedado por el camino.
Eliminar¡Eso haré!
Dulces besos.