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Perdidos en el libro verde
Tomasín se quedó ahí, montando guardia, contemplando ese libro que estaba leyendo el abuelo.
No entendía el comportamiento familiar, cuando era bien sabido que el abuelo siempre decía que su mundo estaba en los libros.
Contemplo aquella imagen de un hombre tan raramente vestido y aquella casa iluminada al fondo en lo alto y le sobrecogió un poco imaginar a su abuelo allá arriba.
Así que abrió el libro y fue pasando las páginas con la devoción de quién respeta lo que desconoce, pero sabe el valor que tiene. Aunque apenas sí empezaba a saber leer trabajosamente un poco, precisamente gracias a su abuelo Tobías.
Evidentemente no entendía casi nada de lo iba deletreando, no tenía vocabulario suficiente para ello, en realidad ni sabía que era eso.
Pero eran tantas las ganas de recuperar al abuelo...
Se quedó repasando con el dedo las líneas en las que estaban las briznas de tabaco, mientras pronunciaba dificultosamente aquellas palabras, de las acabó entendiendo algo de un cazador y un jabalí que eso sí sabía que era, un animal como un cerdo grande que vivía en los bosques y era peligroso como los lobos.
El abuelo siempre le había dicho que en los libros se podía vivir la mar de bien, no en todos, pues los había muy tristes o con peleas y guerras, lo cual no apetecía mucho. Pero la gran mayoría eran para quedarse una temporada.
Cerró el libro y se quedó pensando cual era la magia del abuelo para poder meterse en un sitio tan pequeño.
Toda la familia estaba fuera y le habían dejado solo al cuidado del libro del abuelo, era la primera vez que estaba solo en casa, no le dio ningún miedo, tampoco ninguna sensación especial, diferente, si una mayor tranquilidad de no tener a nadie encima, además el abuelo estaba ahí dentro.
Lo llamó, primero suavemente y luego alzando algo más la voz, pero nada. No hubo respuesta.
Al final, sentado en el balancín del abuelo, se quedó dormido, con el libro verde entre sus brazos.
***
Sin saber cómo se encontró en medio de un camino de tierra humedecido considerablemente por una lluvia muy fina que casi no se notaba.
Estaba realmente asustado, además parecía que las nubes estuvieran a ras del suelo y se lo fueran a engullir, como un jabalí que llego a acercarse lo suficiente para husmearlo y descartarlo como cena posible, alejándose con su trote característico.
Tomasín miró aliviado como se iba, se quedó sin habla ante una mujer vestida de azul que subía de la fuente a escasos metros. Temblaba de pies a cabeza, estaba sin saber que hacer, en un golpe de viento pudo ver tras descorrerse un poco la blanca cortina que le envolvía, unas casas a lo lejos e incluso humo alzándose desde alguna.
--¡Mi chico! ¿Te has perdido?
--No sé dónde estoy.
--¿Con quién has venido?
--Buscaba a mi abuelo.
--¡Ah vale! Vamos al pueblo y seguro que lo encontramos.
Lo cogió de la mano, con cariño sin apretar, en la otra llevaba el cántaro lleno.
Se puso a andar camino abajo, sin decir nada, esperando que le llevara a esas casas, en silencio, con sus lágrimas mezclándose con las gotas de lluvia.
***
Cuando al poco, los componentes de la familia iban retornando de su salida exploratoria en busca del abuelo, se encontraron que Tomasín no estaba y tras un recorrido por la casa, pasaba a ser objeto de búsqueda igual de preocupante o más que la del abuelo.
Invadidos por la tristeza, se quedaron mustios y desolados, sin acabar de entender que maldición se había cebado con la familia.
Barcelona, 8 julio 2022
Muy precioso y emotivo texto.
ResponderEliminarMuchas gracias Tracy.
EliminarHe sentido el texto desde la familiaridad de su masía. Un abrazo.
ResponderEliminarMe alegra hayas captado esa sensibilidad hacia el libro que hace vivirlo.
EliminarUn abrazo.
Tomasín había adquirido de su abuelo el privilegio de saber vivir en los libros, mientras el resto de la familia, ignorante, se preocupaba por ellos.
ResponderEliminarUna joyica, Alfred.
Un abrazo.
Es esa conexión que se produce entre dos generaciones, la que llega y la que se va, que comparte ensoñaciones, mientras que que intermedia se limita a vivir el presente de forma pragmática.
EliminarMuchas gracias Chema.
Un abrazo.
Tomasín encontró la magia que su abuelo amaba de los libros. Un abrazo Alfred
ResponderEliminarEs esa conexión tan especias que se da entre nieto y abuelo.
EliminarUn abrazo MaLquE.
El amor de Tomasín por su abuelo es conmovedor.
ResponderEliminarEspero que la maldición mute en prodigio.
Saludos.
Gracias Toro, es lo que hace pensar que no todo está perdido.
EliminarVeremos sí a eso se le considera una maldición.
Saludos.
Los libros tienen la capacidad de abducirte.
ResponderEliminarUn abrazo.
Una capacidad conmovedora.
EliminarUn abrazo.
Ese nieto encontró un universo en el libro del abuelo.
ResponderEliminarUn beso, Alfred.
Hay una conexión compartida, que les permite disfrutar de otro mundo.
EliminarUn beso Albada.
Alfred, no estaría mal poder escapar, a voluntad, a la novela que uno quisiera.
ResponderEliminarBuen finde.
Sería algo maravilloso hacerlo a voluntad, pero verte dentro de alguna a su voluntad creo que nos ha pasado a todos.
EliminarFeliz Finde Ángel.
Me está gustando mucho este libro verde, nos da esa esperanza que dan las letras el valor de entenderlas y vivirlas. Un abrazo.
ResponderEliminarFin de la Masía, me ha gustado mucho, y me has hecho reir en varias ocasiones, sabes en su disparates de los personajes, al menos en situaciones casi surrealista me recordé " De la Conjura de los Necios", está claro que no hay paralelismo, pero si esa chispa de situaciones absurdas, Te felicito y gracias por ofrecernos momentos divertidos que faltan nos hace.
Un abrazo y feliz finde.
Un abarzo y eli fin de semana.
Muchas gracias Campirela, tendré que esforzarme para darle continuidad.
EliminarUn abrazo.
Me has comparado con una obra, que recuerdo tras la patina del tiempo, como genial. La vida con humor es mucho más llevadera. ;)
No dejes de ponerme alguna crítica de este estilo en la valoración en Amazon, me vendrá bien a mí parca muestra de valoraciones. ;)
Un abrazo y feliz finde!!!
Aquí rau el poder dels llibres, t'engoleixen i et vas perdent (o trobant) entre els seus paisatges i la seva gent, com si fossis una més.
ResponderEliminarI... seguirà?
Aferradetes, Alfred.
Suposo que tots ens hem trobat, a més d'algun llibre, vivint les peripècies d'algun dels seus personatges, deduint-ne els comportaments i respirant a casa seva.
EliminarPer descomptat, m'hi veig obligat, després dels vostres suggeridors comentaris.
Petonets, sa lluna!!!
El maravilloso universo del libro verde va envolviendo a esta familia, ¿habrá alguien más que sueñe con un fantástico viaje literario? Para eso habrá que esperar la próxima entrega, un abrazo Alfred!
ResponderEliminarEn el libro verde, es de suponer, están las respuestas.
EliminarPor lo visto y oído a lo largo de mi existencia, no todo el mundo tiene esa conexión, con la literatura.
Esperemos!!! Un abrazo maría cristina!!!
Un libro escrito en soledad y leído. posiblemente, tambien en soledad nos hace grandes. un abrazo
ResponderEliminarHay quién le llama el vicio solitario ;)
EliminarUn abrazo Ester!!!
Tan maravilloso que ha sido siempre, internarse en los libros, desaparecer del mundo, hasta terminarlos.
ResponderEliminarExcelente relato.
Un abrazo.
Es un mundo maravilloso, por el cual te puedes dejar absorber y estar fuera de tu circulo personal, aún estando en él.
EliminarMuchas gracias Sara.
Un abrazo.
Los libros tienen el poder de transportarnos ❤️
ResponderEliminarLos libros, nos llevan cual alfombra mágica, por todos los lugares que nos muestran.
EliminarGracias.
Cuando la historia te atrapa ya verdaderamene no podrás escapar... El problema es cuando ni siquiera puedes entrar.
ResponderEliminarAbrazo hasta allá.
Es que ni siquiera lo pretendes.
EliminarSino entras en que no está hecho para ti.
Aunque en algunos insistamos de tanto en tanto...y ya sabes a que me refiero.
Un abrazo con aroma de mar.
La magia de los libros se prestan por un momento a soñar e incluso hasta casi desaparecer.
ResponderEliminarTomasín ama la magia de su abuelo y de su libro.
Encantador y tierno relato amigo Alfred.
Un abrazo.
La literatura nos transporta por épocas, paisajes, conocimientos, personajes...
Eliminar¡Hay tanto que agradecerle!
Muchas gracias amigo Juan.
Un abrazo.
Un relato cercano y tierno...muy amoroso. En mi caso personal fue mi amado tío,el que me llevó a la literatura y a amar las palabras!
ResponderEliminarPrecioso!
Un beso.
Muchas gracias lunaroja.
EliminarSin tenerlo del todo claro, en mi caso sería mi madre la impulsora de esa fiebre lectora que me atrapó en épocas infantiles.
Un beso.
Tomasín es muy afortunado. Me ha gustado mucho ese libro verde!!
ResponderEliminarBesicos muchos
Del todo, parece que tiene ese don heredado de su abuelo.
EliminarMe alegra saberlo, eso da pie a continuar.
Muchos besitos.
Me he puesto al día....y me ha encantado.
ResponderEliminarTomasín quería profundamente a su abuelo....el relato es enternecedor.
Un beso Alfred.
Muchas gracias Carmela.
EliminarEstá claro que las relaciones nietos/abuelo (no uso inclusivos) son muy especiales, no viven la realidad, sino el relato.
Un beso.
Encantadora esta parte relatada del libro verde. A ver que pasa con el nieto y abuelo.
ResponderEliminarUn abrazo Alfred y buen domingo.
Gracias Elda, espero os apetezca a vosotros entrar también en el interior de ese libro verde: "El Libro de La Masía"
EliminarMientras tanto seguiré con este cuento ;)
Un abrazo y feliz domingo.
Hola Alfred , no sigas por esos derroteros , que al final acabarás en la hoguera con otros libros prohibidos , que la santa inquisicion quemaba , para que los pobres pueblerinos no supieran leer , y tú tienes todas las papeletas , jajajaja.
ResponderEliminarBromas a parte , está muy bien el ritmo que está llevando el libro.
Sabes no quiero pecar de osada y abusona , pero tú me dejarías esta misma foto , para hacer lo mismo que con el relato de la foto de tu fuente
Te deseo un feliz Domingo besos de flor.
Hola Flor!
EliminarMe asustas, no pensaba introducir meigas en la narración, pero me estás dando malas ideas ;)
Muchas gracias.
No tranqui, puedes usarla, por supuesto.
Feliz resto del domingo. ;)
Has conseguido atrapar en tu relato, la magia de un abuelo y de su nieto, que se buscan y se complementan, en la vida y en la inmensidad porque se admiran. Tomasín y su abuelo, en el libro verde, sueñan y descubren realidades ocultas para otros familiares y vecinos del pueblo. Se movilizan para buscar a los ausentes, pero... hay otros vacíos que no pueden llenarse, por ejemplo con encontrar al niño con su libro. Es más, cuando vuelva a estar solo y vuelva a abrir el libro, y encuentre algunas muestras del tabaco, se volverá a escapar, porque la imaginación le abrirá nuevas puertas. De algún modo, abuelos y nietos, disfrutamos la magia del cariño. Y eso importa.
ResponderEliminar¡Qué hermoso, Alfred!
Un abrazo.
Son relaciones muy diferentes, con el padre hay respeto por una autoridad que con el abuelo queda muy matizada. Al menos es lo que creo, sin tener la experiencia para cotejarlo.
EliminarLo importante es ese cariño que mencionas, con él todo es posible.
Muchas gracias José Manuel.
Un abrazo.
Existe una conexión tan especial entre algunos nietos y abuelos que incluso superan al vínculo paterno filial. Por otro lado, ese poder hipnótico de los libros y su poder de abstracción es complejo de encontrar en otras actividades de la propia vida.
ResponderEliminarSaludos, Alfred.
Eso intento manifestar.
EliminarCon un libro en las manos, explorar la vida es una satisfacción.
Saludos Miguel.
Te admiro pero no estoy de acuerdo contigo
ResponderEliminarYo no necesito un libro en la mano para tratar de ser mejor cada dia
y poder dar mas
Gracias por compartir tus ideas
Gracias Recomenzar.
EliminarCada cual le da a los libros el valor que le parece oportuno.
Tampoco te garantizan ser mejores, cada cual es como es, pero sí ayudan.
Un saludo.
Unas desapariciones muy curiosas y entretenidas. Un abrazo
ResponderEliminarBueno adentrarse en un libro de forma intensa, puede traer estas cosas ;)
EliminarUn abrazo Inma.
Interesante aparecer en lugares perdidos... supongo que será la magia de ese libro verde, y una se queda con ganas de saber cual es el conjuro del mismo.
ResponderEliminarbss
A que tiene un toque de misterio digno de indagar???
EliminarSerá cuestión de seguir la senda de la lectura ;)))
Besos Sylvia.