Foto gentileza de I.C.
Las
suaves sombras de la noche se han adueñado de todo, salvo esa pequeña penumbra
que una luna aun por coronarse, propicia de forma altruista, para evitar el
tropiezo innecesario.
Un
camino empedrado hace resonar todos nuestros pasos, como si fuéramos
importantes, cuando es un simple paseo y
no el viaje al cadalso.
Pues
eso es lo que nos espera, más tarde o más temprano, la sentencia está dictada y
el día de la ejecución por establecer, se ve que el juez no tiene prisa o
tiempo para determinarlo.
Mientras
arrastro las cadenas, cual vasallo que soy, que me atan a este mundo absurdo, en
una sociedad donde la virtud es no comprometerse y la gallardía en ser capaz de
estafar más y mejor.
A
pie de calle las cloacas huelen intensamente, como corresponde a los tiempos
previos de tormenta, aunque esta no acabe de venir.
Los
cirios lloran en las iglesias al ver en que se han convertido sus tutores y por
el miedo que tienen al ver como son sustituidos por luces de colores encendidas
al mejor postor.
Las
olas limpian todos los pies, sean pecadores o virtuosos, pues no hacen
disquisiciones sobre la inmundicia que les acompaña.
Las
hermosas sonrisas planificadas, llenan el día de dicha y permiten recorrer las
horas con alegres sensaciones, esperando triunfar una noche más.
Los
bailes se suceden, haya o no música, pues lo importante es el movimiento y no
el espíritu que lo promueve.
Las
máscaras nos descubren la belleza oculta de unas buenas facciones por
descubrir.
Solo
la amenaza de un nuevo día, nos asusta lo suficiente para resguardarnos en
nuestras madrigueras, bien ocultos para que el brazo vengador no venga a por
nosotros.
Acompañados
de un buen acopio de momentos importantes, escondemos miserias propias y
ajenas, para intercambio de cromos en horas de abulia existencial.
Sarrià,
26 Febrero 2017.
Alfred me estoy enganchando a tu blog, es que qué buena película era el Juez ( la francesa).
ResponderEliminarYo me voy ahora a pasear hacia el Mar que está cerca, y de paso a tomar unas cervezas, que con esto del carnaval, algunas personas no saben si quitarse o no la careta, que miedos a los espejos, por favor, con lo bonita que es la realidad.
Un abrazo amigo, y buen domingo
Un abrazo y disfruta, Marijose.
EliminarMuy bueno. Para mi gusto, de lo mejor de lo mucho bueno que he tenido el placer de leerte.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Chema.
EliminarUn abrazo.
Precioso, Alfred, no tú —bueno, tú también— ;)
ResponderEliminarHay mucha abulia existencial y mucha bulimia cerebral.
Hay tantos brazos que quieren erigirse en jueces vengadores, sobrados de verdades y faltos de sinceridades que si les tuviesemos miedo no viviríamos.
Y vivir aceptando nuestras miserias es alcanzar ese estado en el que ni los vengadores, ni la muerte te asustan.
Me ha encantado, aunque aquí hay mucha tela que cortar ;)
Besines.
La imagen es increíble, se me olvidó comentarlo antes y es de "justicia" hacerlo :)
EliminarBesines
Mucha tela que cortar Livy.
EliminarBesines.
Es de justicia que así lo hagas, :)
EliminarGracias de su parte.
Besines.
Muchas de nadas ;)
EliminarMás besines
Como quieras ;)
EliminarMás besines.
Hola Alfred, tienes razón; la tormenta está pronta, aunque se retrase. Sólo un consuelo:" Las olas limpian todos los pies". Un besazo.
ResponderEliminarEsperemos que limpien a conciencia.
EliminarUn besazo Mara.
Perfecto reflejo de la sociedad del momento,te felicito Alfred por la perfección y la calidad del texto.
ResponderEliminarBesos.
Puri
Muchas gracias por tu felicitación.
EliminarBesos Puri.
Quería volver a leer este texto y comentarlo ahora desde la tranquilidad de la tarde, porque me ha encantado la manera que tienes de describir a este mundo que cada vez lo vamos haciendo más juzgador e hipócrita, entre máscaras las lágrimas se esconden, para sonreir sin ganas, a un día que puede ser matador pero se intentan esconder las emociones porque tal vez a quién llora le consideran débil.
ResponderEliminarLa verdad es que es un tema para extenderse, pero yo lo dejo ahí.
Chapó, Alfred, un placer leerte y estar en tu rinconcito, y por cierto, ya me puse al día en tu blog, vaya sí que me despisté un poquito.
Besos enormes.
Estamos en tiempos de carnaval y todos nos escondemos tras las máscaras.
EliminarEnormes besos María.
Hola Alfred.
ResponderEliminarHas dado en el clavo. La sentencia está dictada y el día de la ejecución por establecer. El juez no tiene prisa para determinarlo.
faltaría añadir, porque la sentencia está establecida de antemano. Y mientras tanto arrastramos las cadenas.
Un escrito de rabiosa actualidad. Las cloacas huelen intensamente...
El hedor no hay perfume que lo ataje.
EliminarUn saludo Enric.
Se me antojan redobles de tambores como ritmo de fondo, cual paso de Semana Santa para este magnífico análisis vital, no por el sentido religioso, zeus me libre, sino por la profundidad de tus palabras.
ResponderEliminarTe deseo unas cadenas ligeras, besitos desde mi madriguera
Invocando a Zeus, te ganas su benevolencia placentera, por unas cuantas lecturas.
EliminarBesitos lopillas.
Como una tesis lírica de lo que puede ser la existencia...
ResponderEliminarLa foto me encanta,es mi hora favorita en mi lugar preferido.
: )
Besos.
Gracias Carmen.
EliminarEl despuntar del día frente al mar, tranquilidad y paz de espíritu :)
Besos.
Terrible actualidad la que has plasmado, con certera sabiduría, de la forma menos doliente, casi tan suave que parece rozarnos tan solo, cuando todos, (o casi) sabemos que si huelen las cloacas...llegará la lluvia y ésta puede ser torrencial...
ResponderEliminarMi aplauso.
Besos.
Llevan tiempo oliendo fuertemente y la tormenta por venir, cuando llegue puede ser terrible y eso tampoco interesa a nadie, pues sufrirán sus consecuencias los más desfavorecidos, como siempre.
EliminarGracias y besos, Marinel.
Una bella manera de plasmar realidades!!
ResponderEliminarBesos
Muchas gracias Ilesin.
EliminarBesos.
Qué maravilla has escrito, Alfred. Me ha fascinado.
ResponderEliminarMuchos besos.
Muchas gracias Celia.
EliminarBesos.
Muchas gracias Julio. La vida es un simple paseo, lleno de complejidades, eso sí.
ResponderEliminarMuchos saludos.
Como siempre amigo Alfred, es una delicia leerte. Lo del cadalso es mejor olvidarlo, no debe de ser nada agradable caminar hacia él.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias María de Los Ángeles, mejor obviemos lo del cadalso ciertamente.
EliminarUn abrazo.
A veces se precisa de un poco de color en nuestras vidas, aunque sea cambiando cromos , sonrisas o lo que sea.
ResponderEliminarBesos.
Depende de a qué cromos nos estemos refiriendo, mejor sonrisas.
EliminarBesos Amapola.
Pones los puntos sobre las íes. Muy buen texto. Lúcido hasta decir basta
ResponderEliminarUn beso
Hola Albada Dos!
EliminarHay que puntuar bien los textos. Muchas gracias. Se reconoce el homenaje :)
Un beso