Por un Sí

Foto del autor

Una notas 

Por un sí, dado con ilusión, curiosidad, misterio, aventura, conocimiento, entrega, compañerismo e incluso amor. No puedes condicionar toda una vida, ni siquiera un día a día continuo.

Tras más de un mes encerrada, comprendió que el individuo que dormía a su lado y con el que se encontraba por todas las dependencias del cada vez más minúsculo apartamento, era alguien al que ya no le apetecía tratar, ni siquiera conocer y menos aún intimar. 

Era eso tan oído de: "No por conocido es menos despreciado" o algo similar, puesto que no comulgaba con lo de: "Más vale malo conocido que bueno por conocer". 

La vida estaba llena de demasiada gente interesante digna de ser tratada y muchas más cosas bellas por ser descubiertas. 

Pero la realidad era la que era, tenía que vivir con su tormento, el cual iba desarrollando un sentido del sadismo que iba in crescendo a medida que el encierro se prolongaba y el brandy se le acababa. 

Al menos con el coñac se aletargaba un tanto y no conseguía sino justo llegar a la cama y desplomarse, eso cuando no se quedaba en el sofá sin poder levantarse.

A medida que las reservas se agotaban, las iba rellenado con un mejunje de procedencia desconocida por clandestina, pero que le iba al pelo para poder ir aguantando.

Al final decidió que las reservas, ampliadas o no, iban a durar menos que el confinamiento y que no se iba a poder liberar de su secuestrador. 

La ciudad estaba paralizada pero debía buscar una solución a su problema. 

Aunque sí vio que las brigadas funerarias municipales funcionaban, recogían cada día puntualmente a la misma hora, lo cual le invitó a formalizar un plan. 

Con el cual todo se resolvió, simplemente utilizó una dosis extra hecha con un poco más de cariño, puesto que era para una despedida algo más larga. 

Barcelona, 14 Mayo 2020.