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Los dioses no estaban atentos, se pusieron a jugar a los dados y en
el fragor del juego desatendieron sus obligaciones, de velar, cada uno por su responsabilidad principal.
Pero ya se sabe que estar siempre pendientes de todo en cualquier momento es muy pesado y poco divertido. Encima están los hombres siempre
enredando.
Zeus se mantenía distante, en su papel de estar por encima del bien
y del mal, marcando autoridad con la distancia, no le gustaban mucho los juegos
pero peor eran las peleas.
Siempre contemplaba con arrobo a su preferida Atenea, abstraída en sus lecturas no
participaba en la vorágine que entretenía a sus congéneres.
Afrodita estaba más pendiente de ser admirada que por el juego en
sí, en el cual sólo participaba en calidad de mostrarse en toda su esplendida
belleza y en consecuencia ser admirada y
enviada por todos los demás.
Apolo intentaba una y otra vez, dejar los dados en conjuntos
armónicos, buscaba que los números mostraran bellos efectos al quedar expuestos
sobre la tela de seda, que amortiguaba su caída.
Urano se distraía, haciendo rabiar a sus compañeros, en oscurecer
el cielo a su voluntad, para mover los dados sin ser visto, cuando la jugada no
le era propicia. Provocando con ello el enfado de Helios, que no le gustaba que
le taparan a capricho con unas nubes.
Poseidón se entretenía en agitar las aguas del mar, creando unas
inmensas olas que eran el gozo de los presentes, para impresionar a Demeter
absorta en las mieses. Pero Selene le retiraba cantidades ingentes de agua con
las mareas, evitando así las salpicaduras molestas de la fría agua salada y de
paso mostrándole su poder.
Ares se aburría, sin un mal soldadito que llevarse a la boca y
esperaba ansioso poder ganar un turno a los dados para poder hacer una de las
suyas, una buen aguerra mantenía a todo el mundo ocupado y regeneraba el
espacio político de los pobres humanos.
Dionisio con la mirada turbia, esperaba que Hefesto se dignase a
empezar un buen fuego con el que poder cocinar las viandas que Artemisa pudiera
traer al acabar el juego, que ya estaba durando demasiado según él.
Hades y Perséfone maquinaban juntos a cuantos de los presentes se
podrían llevar a su terreno para garantizar unas mejores posibilidades para
ellos. Aunque todos se mostraban esquivos ante su presencia y no les daban la
espalda jamás.
Odiseo en una esquina, oculto a todas las miradas, excepto claro
está la de Zeus, se dedicaba a limar astutamente los cantos de los dados, para
facilitar jugadas más beneficiosas para sus intereses. Como no estaba a su
nivel, los demás jugadores no hacían mucho caso a sus artimañas y en su desprecio
estaba parte de la victoria del astuto Odiseo.
Hera lo contemplaba todo con el cariño de una madre, viendo a sus
vástagos, entretenidos y en buena armonía; suspirando para sí, pensando cuanto
iba a durar esta calmada situación.
Llegando Nyx con la respuesta, al oscurecer con su manto, toda la
amplia estancia en donde se desenvuelve tan grácil escena familiar, imponiendo
el orden que obliga al consabido descanso del cual Eos dará aviso de su fin.
Nuevas distracciones para los inmortales seres que habitan en el Olimpo ;-)
ResponderEliminarUn beso!
Las familias numerosas, que ya no se dan, será por la falta de incentivos? Tenían estos comportamientos, creo yo! ;)
EliminarUn beso.
Dios no juga a los dedos,Einstein, hasta que trabajo con las matemática quantica
ResponderEliminarEse Dios, vino más tarde y cogió los dados de Ulises ;)
EliminarReunidos los dioses, cual juegos de geyper, qué peligro tienen
ResponderEliminarUn beso
Bueno no dejan de ser una familia reunida y en todas hay un poco de todo. :)
EliminarUn beso.
Estàn guapos en esa estampa familiar. Abrazos.
ResponderEliminarHan posado para esta especie de fotografía para el álbum :)
EliminarAbrazos!
Ha sido así, sigue siendo y será.
ResponderEliminarLos dioses siguen sin estar atentos,no lo están y se ponen a jugar a los dados. En el fragor del juego, desatienden sus obligaciones de velar, cada uno por su obligación principal y se ponen a jugar... al juego de la cleptomanía.Mientras la familia,la numerosa especialmente, desaparece.
Preciosa fotografía.
Besos.
No prestan la debida atención a lo que sucede aquí abajo, estamos fuera del interés del Olimpo.
EliminarMuchas gracias.
Besos.
Muy ingenioso.
ResponderEliminarTodas las familias tienen su qué... hasta las de los Dioses.
Saludos.
Gracias Toro, como se dice vulgarmente, en todas partes cuecen habas :)
EliminarSaludos.
La familia que se entretiene unida, permanece unida.
ResponderEliminarJajaja!!! Bien cierto :)
EliminarSaludos.
Esta familia estaba sobrada de dioses y así les fue. Juntos y revueltos.
ResponderEliminarBesos Alfred.
Puri
Es una familia peculiar con las desavenencias de una tradicional :)
EliminarBesos Puri!
Me has recordado la reuniones de mi ex familia jajaja
ResponderEliminarTodo paz y armonía :P solapando una inmensa hipocresía
Buen texto me gusta toda la temática de la historia antigua incluidos sus dioses .. otra cosa que que esté de acuerdo o no con sus menesteres
besos y buen finde
Bueno en todas las familias hay de más y de menos, al menos parece que tú ya te has librado :)
EliminarMuchas gracias!
Besos y buen finde!
Las deidades siempre tan fascinantes :)
ResponderEliminarBesos Alfred!
Es que son imprevisibles :)
EliminarBesos Sofya!