Encuentro



Cruzó la calle como siempre, sin mirar y a toda prisa, las farolas de la calle ya ganaban a la luz natural, momento en que se mezclan las sombras.
Ella no vio por que no miraba, y el conductor del vehículo por que estaba atendiendo una llamada.
Fue un encuentro casual, sin llamarse, tenían una cita pendiente, pero siempre se aplazaba, sus ocupaciones tan absorbentes les impedía una comunicación personal.
Pero ese encuentro no programado, les destrozó un posible futuro.

Alfred

Viernes, 16/XII/2011

8 comentarios:

  1. Esos encuentros, como un tropezarse de forma súbita, qué pueden deparar, o qué cercenan para siempre....

    Es un texto que deja la puerta abierta. Me ha gustado mucho. Un abrazo, Alfred.

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    1. Hay esos encuentros imprevistos que pueden ser nefasto...o no!
      Un abrazo.

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  2. Un escrito corto pero intenso y sobre todo, fatal.
    Mejor no se hubieran levantado lo dos de su cama. Buen escrito.

    Un abrazo.

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    1. El solo hecho de levantarse, incluye el factor de riesgo, de enfrentarse a lo inevitable.
      Un abrazo.

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  3. De qué manera más tonta se puede destrozar una vida y acabar con otra, pero sucede todos los días.
    Muy bien reflejado.
    Saludos.

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    1. La vida está llena de situaciones tontas e imprevisibles, con una ascendecia total sobre nuestras vidas.
      Gracias por tu comentario.
      Un saludo.

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  4. Hola acabo de encontrarte en el blog de Epi, y si te parece bien me quedo, y en relación a esta micro historia decir que hay encuentros fortuitos que pueden cambiar cualquier destino . Muy bien contada , me alegro de encontrarte ya ves una cosa casual, como tu mismo narras en esta entrada. Espero tu visita a mi blog.
    Un saludo desde Vigo
    Puri

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  5. Bienvenida! Estamos hechos de situaciones fortuitas, te visitaré con mucho gusto.
    Un saludo Puri.

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