Amanecer (Foto de I.C.C.)
Una llamada a deshora, se
levanta de la mesa, abandonando una “butifarra amb secas”
-
"Será esta
noche" Solo una frase y cuelgan.
Regresa al comedor.
-
Cariño, tengo que
salir.
-
¿A estas horas?
-
Sí, el Paco se ha
quedado tirado en el cerro, voy a buscarlo.
-
Y te vas así. ¿Sin cenar?
-
Ya estaba,
Prácticamente.
-
¿Es un accidente?
-
No, una avería o un
pinchazo no sé, nada grave, pero he de pasar a recogerle.
-
Bueno vale. Abrígate que ya refresca.
-
Si mujer.
Es noche cerrada, la luna está en cuarto muy creciente, pero unas
buenas nubes cómplices, están de su parte y ayudan a esconderlos.
Han quedado en encontrarse en un cruce de caminos forestales, ahí
les pasarán los juguetes para que estén en el lugar previsto, a la hora acordada, el día del cumpleaños.
Uno de ellos enciende un cigarrillo, para hacer pasar el rato ,
que rápidamente se lo sacan de la boca con una palmada y lo pisan de inmediato,
cuando aterriza en el suelo.
-
¡Estás loco! Nos
pueden ver.
-
Vaya, no pensaba que
estábamos en una peli de espías.
-
Esto es peor, nos
jugamos mucho. hay mucha gente esperando.
-
Ya lo sé, pero
llevamos mucho rato aquí esperando...
-
Ten un poco de
paciencia.
-
Ok, esperaré.
Escuchan su propia
respiración, en un vaivén de sube y baja, fruto del temor a ser descubiertos en
su misteriosa operación, intenta ver la Osa Mayor, para ambientarse mejor con
lo que están haciendo.
En esto se oye el ronroneo de un motor, cada vez más cercano,
hasta que aparece un todo terreno, con las luces apagadas.
También se bajan dos hombres.
-
¡Hola chicos!
-
¿todo bien?
-
Sí, todo bien.
-
Os traemos la mercancía.
-
¡Cómo ha ido por la
frontera?
-
Ningún problema
-
¿No han mirado nada?
-
¡Llevando esto?: Enseñan
un jabalí muerto, sobre el techo del coche.
-
¡Caramba!
-
Así no tenemos pinta
de señoritos.
-
Muy bien, pues venga
va.
Empiezan a pasarles los
bultos, bolsas de basura, de esas negras industriales, lo que llevan
parece pesar bien poco. En nada les han pasado una gran parte de la carga.
-
¿Y ahora qué? Nosotros
nos vamos a la parroquia de Sant...allí nadie mete las narices, ni Dios, bueno
ese siempre está dentro.
-
Nosotros los pondremos
en lugar seguro, dentro de un ...
-
Si mejor ahorrarnos
palabras.
-
Adiós compañeros.
-
Adiós y suerte.
Los vehículos se separan con
sus bultos misteriosos, camino de sus sendos destinos.
El día 1, les espera, con su peligrosa y preciada carga, bien a
punto.