Rachmaninov Concierto para piano no.2
Ekaterina Mechetina (piano)
Moscow Philharmonic Orchestra
Conrad van Alphen (director)
Sendas
Caminos ocultos, siempre misteriosos,
de esos que se adentran en lo desconocido,
donde las luciérnagas, son luz para los perdidos,
que nos adentramos en ellos sin saber,
y para cuando ya estamos metidos,
el saber cuenta poco para sobrevivir,
y mucho para no enloquecer.
Una escalera surgida del más allá,
nos hace las veces de llamada,
atrayendo hipnóticamente,
como puerta de salvación,
a la que obedecemos, por miedo,
al no tener referentes de las sendas,
utilizadas por nuestros ancestros.
Acabaremos perdidos,
entre las mismas marañas salvajes,
que nos rodean en todo momento,
verdes y espesas,
subiremos los peldaños,
obedientes a la llamada,
de esa naturaleza inmisericorde,
marcando su ley.
No estamos perdidos,
ese camino ha sido transitado,
pero sin dejar más testimonio,
que esa obra hecha en piedra,
para testificar el paso de otros,
cuyas huellas nos preceden,
y no regresan.
Terrassa, 18 septiembre 2024
Profundo y muy bonito.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Amalia.
EliminarUn abrazo.
Esa huella hecha en piedra que dejaron quienes nos preceden hacen más amable nuestra estancia. ¿Les sucederá lo mismo, con respecto a nosotros, a quienes vengan detrás?
ResponderEliminarUn abrazo.
Buena pregunta. ¿Qué mundo estamos dejando?
EliminarUn abrazo.
Magnífico poema, Alfred, sus versos nos llevan...
ResponderEliminarAbrazo hasta vos, Poeta!!
Muchas gracias, carlos.
EliminarDejémonos llevar por ellos y busquemos en nuestro bosque particular.
Abrazo compañero!
Caminamos sobre las huellas de los que llegaron antes, recorremos los mismos caminos y, aún así, nos creemos únicos y especiales, pensamos que el mundo ha sido hecho para nuestros designios.. qué locura, ¿verdad?
ResponderEliminarAprovechamos sendas dejadas por los antepasados, dando por hecho que son nuestras.
EliminarLo peor es que, muchas veces, las aceptamos como propias sin cuestionarnos si de verdad queremos seguirlas.
EliminarNo, eso está claro, somos víctimas de las tradiciones en demasía.
EliminarCondenados a esas huellas que debemos seguir para abrir otros senderos que den término a la maldición. Saludos. Carlos
ResponderEliminar¿Es maldición seguir viviendo? Dejemos la senda bien marcada y útil.
EliminarSaludos, Carlos.
Esas sendas que tantos pies pisaron y tantas historias guardan en sus piedras.
ResponderEliminarEllas hacen caninos y estás a veces hasta carreteras. Un abrazo.
Por generaciones fueron utilizadas, hasta muchas veces caer en el olvido o la inutilidad, pero están ahí y son un reflejo, de su paso.
EliminarUn abrazo.
Creo que esa escalera de piedra, hecha por personas que estuvieron antes, en cierta manera nos endulza la senda y nos la hace más asequible y llevadera.
ResponderEliminarUn beso
Nos facilitan el paso hacia esa ascensión, vete a saber a qué misión, en ese bosque que espera misterioso.
EliminarUn beso.
Me parece que lo que nos atrae a los urbanitas, practicamente todos, no nos engañemos, de esas escaleras es que marcan un csmino a la civilizacion, a la regulacion, a lss señales y msrcas del camino.
ResponderEliminarAbrazlooo
Los urbanitas nos sorprendemos por todo aquello que no podemos cuantificar.
EliminarSemejante obra para un tránsito reducido, no lo acabamos de entender. No pensamos en los que nos seguirán.
Abrazo.
Un camino que transcurre , la metafora de la vida,otros lo pisaron antes y otros lo caminaran despues. Un abrazo
ResponderEliminarTodos los caminos están, o estuvieron con algún fin práctico.
EliminarInterpretarlo es libre.
Un abrazo.
Com sempre les teves fotografíes parlen , Alfred !. Ens presentes un camì que a força de caminar.hi , s.ha anat fent . El camì de la vida pot ser llarg , planer , senzill ,... també complicat de transitar.hi , ferragós , a vegades gens fàcil . Peroʻ l.hem de fer ! Uns en calma , d.altres buscan dreceres .....Ja ho và dir Machado , ' Caminante no hay camino , se hace camino al andar ' Res és fàcil , el camì el fem caminant ! Molt oportuna la mùsica , suau , fàcil i enérgica . Les situacions que ens marca el camí !. Molt bó el relat Alfred , Gràcies ! .. .. .. Pepi.
ResponderEliminarSón llocs, que gràcies a les fotos, pots tornar a gaudir i aleshores, inspiren.
EliminarMerci, Pepi!
Magnìfica foto ! He volgut treure.n una metàfora ......
EliminarRealment parlant!!!
Eliminar;)
Hay muchas sendas que han sido abandonadas y no dejan ver ni el suelo que ha sido pisado por los años e incluso por los siglos.
ResponderEliminarSaludods
Los bosques han ido creciendo, a medida que el hombre ha dejado de explotarlos, quedan los restos de esa época, en que el hombre se adentraba en ellos.
EliminarSaludos.
Que bonito Alfred. No suelo pisar sendas desconocidas, el miedo me puede, ni siquiera por curiosidad. Ni en la vida, ni literalmente en el bosque, :))). Bueno, si hay un sendero como el de tu foto, me lo pensaría, jjj.
ResponderEliminarUn abrazo y buen fin de semana.
Muchas gracias, Elda. Bueno, por el contrario, a mí, me encanta perderme por ahí. ;) Claro! que sea así, anima.
EliminarUn abrazo y buen finde.
Muy acertado el poema, pero ¿no es la vida algo parecido, y no solo metáfora?
ResponderEliminarMuchas gracias. En la vida, tenemos opciones y caminos a seguir.
EliminarQuerido Alfred, precioso poema, me encantan esas sendas que te llevan a los desconocido, pensando que antes fue transitadas por otros que quedaron en el olvido.
ResponderEliminarMe encanto!!!
Abrazos y te dejo un besito, que tengas un feliz día querido amigo
Gracias, Liz. Sendas, algunas transitadas, otras que lo fueron y quedaron abandonadas, en todas ellas hay huellas.
EliminarAbrazos y besos, querida amiga, feliz finde.
Subiendo los peldaños, escuchando la música, leyendo tu poema, hacemos el camino, Alfred, un abrazo!
ResponderEliminarHay que adentrarse en lo desconocido, no nos queda otra. ;)
EliminarUn abrazo, cristina.
Només estem de pas en aquest món, un pas que han fet milions de persones i ens han deixat només una petita part del que van fer-hi... veurem el que deixem nosaltres els que vinguin darrere...
ResponderEliminarMolt bonica la foto.
Aferradetes, Alfred.
Estem de pas, i mai sabem quantes passes farem, cal aprofitar els camins que ens han deixat. I tenim el deure de què estigui millor després.
EliminarAferradetes, sa lluna!
Hola Paula.
Eliminar¿Que sólo estamos de paso en este mundo? ¡Sin duda!
¿Qué cuántos pasos daremos nosotros?... ¡Los necesarios!
Lo que quiera que sea que otros hicieron, anduvieron, etc., ¡sus vidas!
Igual que un curso de estudios (de vida). Nuestro, personal, al margen de lo que hiciesen/superasen otros.
Quienes me precedan, su contexto, sus vidas. No tengo la más mínima responsabilidad en ellas!
Abrazos amiga.
¿Precedan?... :))))))
EliminarUn lapsus!
Quienes vengan después...
Lo entendí perfectamente. ;-)
EliminarAferradetes, Ernesto.
Dan ganas de subir por esas escaleras a ver dónde me llevan, me gusta perderme por entre la naturaleza, respirar el paisaje, me encanta caminar por esos lugares, hoy contigo he caminado de la mano de tus letras, y de la foto, un auténtico placer.
ResponderEliminarBesos.
La verdad es que atraen lo suyo. ;)
EliminarMuchas gracias, maría!
Besos.
Las sendas tanto naturales -bella imagen- como espirituales van marcando nuestros caminos para la reflexión así como la elección de los caminos vitales como reflejas en tu poema. Te deseo una buena entrada en el otoño que cada vez está más cerca.
ResponderEliminarAbrazos.
Tenemos muchas sendas por delante, tanto de un tipo como de otro, y es bueno que sea así.
EliminarQue tengamos un buen principio de otoño.
Un abrazo.
Cuántas vivencias penden de esos escalones; cuántas historias que dejaron su huella recorriendo esa senda y que, de alguna manera, quedó la energía levitando sobre ella y más allá, adentrándose en el bosque...
ResponderEliminarCuando uno se para a pensar en ello, así como cuando se visitan algunas ruinas o ciudades con ese poso maravilloso de la historia, siempre se eriza el vello.
Sublime comunión la de tus versos y el concierto de Sergei Rachmaninoff.
Un placer, querido amigo.
Abrazo grande 💙
La cantidad de veces que habrán sido transitados por diversas e incontables generaciones, las hacen valiosas.
EliminarSon sencillas, nada monumentales, simplemente un acceso, eso les da grandeza, por ser algo de uso cotidiano, imagino.
Muchas gracias, Ginebra, un gran abrazo.
Ninguno ha vuelto para explicar que hay al otro lado.
ResponderEliminarSeguiremos las sendas de los que nos precedieron y tampoco volveremos.
Así de duro es.
Saludos.
Tampoco le creeríamos.
EliminarSeguimos y marcamos, es de suponer, sabiendo que no hay retorno.
Volverse un ser decrépito, por los años de los años... tampoco seduce en demasía.
Saludos.
Buen día Alfred.
ResponderEliminar"...el paso de otros,
cuyas huellas nos preceden,
y no regresan."
Desconocer un "hecho", no supone que éste no sea "real"... :)))))
Bonito finde amigo.
Buen día, Ernesto!
EliminarNo, pero presupone, que esa realidad no esté constatada.
Feliz finde, amigo.
Como dijo Machado, se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Me gustan esas escaleras.
ResponderEliminarAbrazos.
Sí, palabras a tener en cuenta.
EliminarTienen un encanto sugerente.
Abrazos, Conchi!
Tus caminos y peldaños, están llenos de versos y letras, que nos muestran un camino lleno de vida y luz. Sí, nos preparamos para llegar a ese lugar del que nadie nos ha contado, pero es muy bonito hacerlo con belleza y versos, como tú nos enseñas.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Un inicio de camino, con escaleras, y un trayecto más o menos largo, cada cual tiene el suyo.
EliminarMuchas gracias, Nani.
Muchos besitos.
Sendas que guía la intuición...
ResponderEliminarConmovedor poema, llega profundo.
Alfred, un abrazo
Sabremos seguirla con los ojos cerrados.
EliminarMuchas gracias, Milena.
Un abrazo.
Un buen poema que te hace pensar. Besos.
ResponderEliminarGracias Teresa, a veces pasan cosas que te obligan a ello.
EliminarBesos.
Es vivir, Alfred. Lo que hemos de recorrer.
ResponderEliminarUn abrazo.
Exactamente el camino de la vida.
EliminarBesos, Sara!
Escaleras, en un camino frondoso es un aliciente para subir .
ResponderEliminarBesos.
Esas escaleras invitan a adentrarse en ese espesura verde.
EliminarBesos, Amapola Azzul!
Estas sendas que describes con todo lo que implica recorrerlas, parece una alegoría a las sendas de la vida misma. Va un abrazo, Alfred.
ResponderEliminarEn eso estamos. ;)
EliminarUn abrazo, Julio D.
Alfred, aunque otros hayan dejado sendas señaladas, seguirlas o no es nuestra elección ése es nuestro poder, quizás creando otras nuevas para que alguien las elija.
ResponderEliminarUn abrazo.
Podemos seguirlas, profundizar en ellas o ignorarlas y trazar de nuevas, todo es válido y útil, esperemos, para los que nos sigan.
EliminarUn abrazo, Mara.
Siguiendo las huellas de viejas edades, Alfred, podremos descubrir nuestras raíces y así labrar el futuro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí, eso está bien, pero sabiendo nuestras raíces, hemos de ser árbol, cuanto más frondoso, mejor.
EliminarUn abrazo.
Hola Alfred! Estoy extrañando la historia en capítulos, no sé qué será de esa cantidad de gente en espera, un abrazo!
ResponderEliminarUf!, con esto de las vacaciones y otras cosas que han pasado, los pobres están en la nevera esperando poder salir. ;)
EliminarTengamos paciencia.
Un abrazo!
Tus versos son siempre muy buenos. Tienes que ponerlos más,
ResponderEliminarLa música. siempre es buena.
Un abrazo.
Muchas gracias, María De Los Ángeles.
EliminarYa me voy prodigando, pero cuesta.
La música nos hace la vida más agradable.
Un abrazo.