Una Bala, una goma
Un lápiz, un niño
Eran seres muy magnánimos
tanto, que ante el momento
que se te presentaba esa noche
de desconcierto para ti
te pusieron delante los tuyos.
Para que fueras el primero
y evitarte así la angustia
de esperar tu momento final,
una vez vieras de que iba aquello.
Con dos disparos te liquidaron
te arrastraron a la fosa
donde dormirías tu sueño eterno
como un desaparecido más.
No pudiste usar el lápiz
ese que usabas para tomar notas
o quizás las borraste con la goma
pues nadie te las iba a creer,
junto a ti, quedaron de testigos.
Esa gente tan noble, fiel y creyente
que se partía el pecho por la patria,
no podría hacer una cosa tan aberrante
con sus conciudadanos y menos un crío.
Pero tus instrumentos y la bala
esa alojada en tu cabeza
dan testimonio que el diablo
corrió por un barranco
con asistentes henchidos
de honroso orgullo patrio.
Aniquilando alumnos y maestros
incluso poetas de moral distraída
para el concepto que, del amor,
podían tener esos salvajes
de escopetas prestas.
Terrassa, 22 abril 2024
Brutal...
ResponderEliminarTus versos golpean la conciencia.
Besos!
Qué bien descrito Alfred, se pone la piel de gallina (como decimos por aquí) y es que todo lo que narras me tocan muy de cerca. Soy nieta de una de esas victimas y crecí y viví bajo esa tristeza y esa impotencia.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Hoy tus versos nos tocan la fibra sensible, magistral Alfred.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Las guerras desatan los más bajos instintos de los hombres. En la guerra civil de aquí no elegías ni el bando en el que querías competir. El que te tocaba, según dónde vivieras. Tenías muchas posibilidades de que tu enemigo fuera tu hermano de sangre. En mi familia coincidió que las víctimas lo fueron del bando supuestamente bueno. Una pobre viuda y su hijo de 16 años, que había cometido el delito de estudiar para cura.
ResponderEliminarUn abrazo.
No sé si estoy demasiado sensible, pero me he emocionado con tu elegía.
ResponderEliminar¿Acaso nunca podrá el ser humano, ser realmente humano?
ResponderEliminarUn abrazo fuerte.
Has descrit tant bé els horrors de la guerra en aquest relat Alfred , que els que per edat , recordem que aquì tambè les nostres famìlies en van patir. Beneída per l.Església... i els horrors continùen en altres guerres que les contemplem en directe.... La bogerìa d.uns , la venda armes dels altres , criatures soles...... Qui posarà coneixement al cor dels homes ? El teu escrit và directe a la conciència de tots. Demanem la Pau , aixì sigui !! Bona nit tinguem !. .. .. Pepi
ResponderEliminarAlfred, una realidad que golpea y no sentimos impotentes ante tanto horror.
ResponderEliminarEs gente sin corazón la que del gatillo aprieta, son monstruos que se dicen humanos.
Sera que en eso nos estamos convirtiendo?
Cariños y besos mi querido poeta y amigo
Genial poema. Te mando un beso.
ResponderEliminarEse cráneo infantil nos demuestra qué vileza usaron los que luego fueron los vencedores, esos dictadores que no pestañearon ni ante un aniño que consideraron rojo.
ResponderEliminarUn buen poema, Alfred. Un beso.
Y solo tenia 11 años, le metieron una bala en la cabeza y lo tiraron a una zanja en el barranco de Viznar junto a otros cientos que terminaron su vida de igual manera, mientras tanto, hay algunos que quieren cambiar la historia para que no se conozcan sus horrores, y viven entre nosotros.
ResponderEliminarSaludos
Duele tanto que no sé qué decir...
ResponderEliminarQué horror.
Uffffffff
Saludos.
Que asesinen a cualquier es terrible, que asesinen a un niño algo además de demencial imperdonable. La barbarie se apodera de los hombres en todas las guerras pero incluso en medio de la locura, naide debería ser capaz de apuntar a un niño. Terriblemente bello lo que has escrito ALFRED. Un beso grande, con pena hoy por tus letras.. a pesar de ello, te deseo un feliz San Jordi y para compesar el dolor, una rosa!!! para ti y otra para el pequeño.
ResponderEliminarDesgarradora entrada ¡Cuanta vileza!.
ResponderEliminarAbrazos Alfred.
Un dolor inenarrable que pudiste poner en poema, Alfred, Joan Baez acompaña con su voz, un abrazo!
ResponderEliminarNo saquemos conclusiones, quizás se lo merecía.. Visto lo visto, ni tan siquiera parece un argumento fuera de lugar, ¿verdad?
ResponderEliminarLo has descrito a la perfección, lástima que haya tanta gente empeñada en no entendr.
Fa mal, molt... i tot el cos tremola...
ResponderEliminarAferradetes, Alfred.
Excelente y doloroso.
ResponderEliminarFeliz día.
Un abrazo
Querido amigo, precioso poema que muestra el horror y la bajeza del ser humano.
ResponderEliminarAbrazos, te dejo un 💋 y una 🌷 para darle un poquito de belleza a tanto dolor
Escalofriantes palabras mostrando una vez más la vileza del ser humano.
ResponderEliminarLos niños deberían estar al margen y nosotros deberíamos poder cambiar la historia.
Un abrazo Alfred.
Balas y niños, una combinación deleznable.
ResponderEliminarUn abrazo Alfred
Es lo que tiene lo "patrio" amigo.
ResponderEliminarAyer "prestadas", hoy papeletas en urnas que mantienen a los mismos...
Abrazos Alfred.
Muy bueno el poema y muy triste. Un abrazo.
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