Rayvon Owen & Olivia Kuper Harris
Diálogos callejeros
A veces, sólo a veces, se pueden tener uno de esos encuentros fortuitos, en los que no te esperabas ver, ni en ese momento concreto ni de esa forma.
¡Hola!
Hola
¿Te pasa algo?
Nada. Me estaba sacando una piedra del zapato.
¡Ah! ¡Vale!
Aspecto serio, ni una sonrisa, mirada esquiva, la sentí incómoda y poco presta a conversar.
Por romper un poco el hielo, que consideraba absurdo entre nosotros, le hablé de unos amigos comunes que habían tenido un pequeño percance de salud.
Con ello se podía explayar un poco y hablar de lo suyo. Lo hizo.
Desconocía lo ocurrido, a pesar de tener contacto diario en un grupo de WhatsApp compartido con ellos, lo cual me sorprendió.
Incluso luego, por seguir la misma línea, me comentó sobre la salud de una amiga suya, que yo apenas había visto un par de veces, que había tenido una operación seria. Parecía que se había salido bien.
Seguimos caminando, uno al lado del otro, guardando las distancias.
¿Todo Bien?
Sí, bien, muy bien
¿Y tú, cómo estás?
Ya sabes cómo estoy. Me conoces lo suficiente para saberlo.
Sí, claro.
Así habíamos andado unas manzanas, nada que ver como lo hacíamos antes, ahora éramos solo unos conocidos hablando educadamente, nada de besarse en los semáforos.
Aproveché la ocasión para comentarle una notificación para presentarme a una consulta médica que no me había dejado muy tranquilo y a la cual había contestado con una pregunta a mi Cap. De la cual, evidentemente no tendría respuesta hasta pasados diez días.
Le quitó importancia diciéndome que sería para un estudio.
Ahí nos separamos, opté por coger mi camino más directo, ahora ya no era su compañía preferida para acompañarla a su casa.
Hay que apartarse antes de sentir que sobras.
¡Bueno, que te vaya bien!
Gracias, a ti también.
Ni abrazos, ni besos, ni un simple apretón de manos, no hicimos ningún gesto al respecto.
Es curioso que la persona que hace pocos meses lo era todo para mí, se haya convertido en una nadería que apenas permite una conversación de ascensor.
Barcelona, tres de febrero 2022
Así pasa mi querido caballero. Esa primera vez tras un adiós resulta incómoda, pero sirve para darte cuenta que es una historia cerrada, y que es mejor seguir camino.
ResponderEliminarDescribiste de manera clara esa situación.
Besines.
La verdad es que se hace extraño, no ver ni un atisbo de lo que fue.
EliminarSí, hay quién es capaz de cerrar a cal y canto su vida.
Muchas gracias, es una descripción realista.
Besines.
Volver a recibir después de decir adiós, la reacción duele, per o no hay más remedio que tirar para adelante,
ResponderEliminarsi o si, no hay dos si uno no quiere, puedes insistir pero nada será igual cuando se cierra una puerta.
Me ha gustado esta reflexión Alfred.
Feliz fin de semana. Un abrazo
La vida sigue, cada cual con su mochila.
EliminarLas parejas se rompen solo que uno no quiera seguir.
Muchas gracias Carmen.
Feliz finde.
Un abrazo.
Diàlegs freds, com ara el títol de la teva entrada. Crec que la millor imatge d'aquesta conversa, és aquest banc buit i desangelat.
ResponderEliminarAferradetes, Alfred.
Diàleg fred, amb paraules justes i seques, cap empatia, tot tancat, ni un atusseig d'humanitat, cap record a la complicitat compartida.
EliminarAferradetes sa lluna!!!
En mi barrio dicen "duele, cualquiera sea la razón... pero de la que te salvaste, amigo, aunque no lo creas."
ResponderEliminarAbrazo más que agrande, Alfred.
En tu barrio son muy sabios.
EliminarGracias por el abrazo, otro para ti amigo.
Ni en el ascensor, en todos hay carteles avisando que de uno en uno y hasta el banco está libre por miedo a que alguien se siente a tu lado. Noso olvidaremos de hablar, los niños ya ni vocalizan bien porque en el cole no ven la boca de la profesora. Un abrazo
ResponderEliminarAca no es asi
EliminarNo somoa chicos a uds
los trat como infantes jajajaj
Bien es verdad que con la boca tapada, las cosas aún se ven más frías.
EliminarUn abrazo Ester.
Hola Mucha!
EliminarQuizás vosotros seáis menos remilgados.
;)
Tiempo al tiempo, al menos una cierta cordialidad parece que es posible. Tiene que correr el aire y que los malos humores se ventilen.
ResponderEliminarUn abrazo y buen finde.
Esperaba algo de más complicidad.
EliminarPero ante una puerta cerrada, mejor darse la vuelta.
Se sentiría culpable.
Un abrazo y buen fin de semana Ángel.
Así es, Alfred, conexiones que desaparecen de la persona que llegó a ser primer y último pensamiento del día.
ResponderEliminarMil besitos para ti y feliz finde.
Es bien curioso, ese transitar del todo a nada.
EliminarMil besitos y buen finde Auroratris.
Tot i que resulta dur i cruel, aquesta "persona" ha fet un favor immens. El temps ho demostrarà.
ResponderEliminarUna bona abraçada.
No sé si és un posat.
EliminarPotser sí, que en el fons,
m'hagi fet un favor.
El temps ho dirà.
Una forta abraçada Joan.
Que cierto lo que dices, alguien que una época de tu vida era lo más, pasa a ser lo menos e incluso indiferencia que es peor.
ResponderEliminarSi buscamos la parte positiva , es cuando te das cuenta que la página se paso. Un abrazo .
La indiferencia duele más que el olvido.
EliminarEso espero, el tiempo todo lo cura.
Un abrazo Campirela.
Le tenias que haber recordado algun buen momento del pasado, así te odiaría para siempre. Ya no mira el wasap porque estas tu. Estoy de acuerdo con Perrotti. Para despedirte puedes usar :"...el saco" o "...el culo", aunque sea en voz baja y solo lo oigas tú.
ResponderEliminarAbrazo fuerte, Alfred.
Ese banco está muy apetecible de usar, y es raro,porque ese modelo suele estar tan bajo, que hay que tener piernas de ciclista para levantarte luego.
No soy tan malo ;)
EliminarCada cual sabe de sus pensamientos.
Un banco a la vieja usanza, que por suerte aun se conservan.
Es de lamentar pero a veces ocurre; y da rabia. Pero mejor aceptarlo.
ResponderEliminarSí, son cosas que pasan y da igual como te hayas comportado.
EliminarMás que rabia, desconcierta y apena.
Aceptado está.
Un día eres un ídolo y al otro, te has caído y te has hecho añicos. La vida es dura y muy volátiles. Somos muy tarambanas, como decían mis mayores.
ResponderEliminarBesicos muchos.
En un tiempo récord, pasas a la nimiedad más absoluta.
EliminarMientras recoges los trozos, ni pena das.
Te da que con la edad, valoras más ciertas cosas, pero se me da que no para todos.
Muchos besitos Nani.
La vida nos va cambiando, solo es eso...
ResponderEliminarUn saludo.
La vida nos cambia a cada momento y eso desconcierta.
EliminarUn saludo.
La indiferencia duele mucho pero es mejor así.... Cosas que pasan seguido en la vida. Saludos amigo Alfred.
ResponderEliminarPuede ser que sea mejor, pero llegué a creer que algo más civilizado era posible.
EliminarLa vida sigue. Saludos Sandra.
La verdad es que es triste que ocurra eso después de haber tenido una relación estrecha.
ResponderEliminarBien expresada esa conversación Alfred.
Un abrazo y buen fin de semana.
Yo diría que algo más que estrecha.
EliminarMuchas gracias Elda.
Un abrazo y buen finde.
Es muy duro sentir eso.
ResponderEliminarYo lo he sentido alguna vez y te quedas hecho polvo, y lo peor es que no sabes qué ha pasado...
No queda otra que aceptarlo y seguir adelante.
Saludos.
Lo es, incluso me pareció inhumano.
EliminarPor suerte llega un momento que dejas de pensar en el por qué y en darle más vueltas a lo inevitable. Para seguir con tu vida.
Saludos.
¿Lo era todo?, algo habrá pasado, hay que contarlo.
ResponderEliminarSaludos
Para mí sí lo fue.
EliminarPoco hay que contar.
Saludos.
A veces las amistades se enfrían del modo más absurdo. En el próximo encuentro, ya no habrá ni un simple "hola".
ResponderEliminarSaludos.
No se trata de un amistad.
EliminarSeguramente si se produce otro encuentro, que es muy posible, ese "hola" sonará como un chasquido.
Saludos.
Así es la vida. Todo cambia. Y las relaciones también cambian. Lo importante es seguir manteniendo la cordialidad. Y dejar a un lado los rencores. Aunque la relación ya sea mas distante.
ResponderEliminarMe ha gustado este dialogo. Como la vida misma. Y la foto con ese banco dan ganas de sentarse.
Besos.
La vida es un cambio constante, pero a veces es un vuelco total.
EliminarCreí en esa cordialidad, por los buenos momentos compartidos, pero parece que molestan.
Es un pedazo de fría realidad, plasmada en unas líneas.
Besos María.
Sí que parece serio, sí.
ResponderEliminar¿Tendrá razones personales, ella consigo misma, para esa actitud? Hay días y días... Y los últimos tiempos pueden descolocar a algunos.
Abrazos Alfred.
Es una cosa seria.
EliminarAllá ella con su conciencia.
A la mía no le afecta.
Abrazos Ernesto.
La culpa es del Cola-Cao. A veces al mezclarlo con la leche... y zás!! ya estás todo el día de eso...mala leche.
ResponderEliminarIgual la vuelves a encontrar otro día y te propone "un alivio" 😉
No le des vueltas, que los días son breves y las horas 24 veces más.
Creo que se debió poner coca-cola, ;)
EliminarMejor no, más me vale.
Los días pasan y hay que estar con el humor puesto.
Gracias Ricard.
La indiferencia es lo más doloroso, aunque la cadencia de la música acompañe el relato, Alfred, un abrazo!
ResponderEliminarLa música nos suaviza las horas, por tristes que sean.
EliminarUn abrazo maría cristina.
Si el sentimiento ya no existe y la persona que tenemos al lado nos produce indiferencia....mejor es dar la vuelta
ResponderEliminarMe ha gustado mucho el relato, buen fin de semana
Un abrazo
Carmen
Bueno, la cuestión es que los sentimientos son dispares y las indiferencias también. Supongo que sí se produce otra vez será mejor girarse.
EliminarMuchas gracias Carmen.
Buen finde, un abrazo.
Hola Alfred!
ResponderEliminarMe gustan mucho los comentarios que has tenido. Son muy humanos. El encuentro, por dentro tiene que doler, hacer daño, porque ahora hay indiferencia, donde antes había cariño. Este momento tenía que llegar. Ha llegado. Una circunstancia más, que ya has superado. Comprendo que sea duro.
Hola Enric!
EliminarLa verdad es han sido lo mejor del post.
Se tenía que producir un día u otro, pero no pensaba que tuviese que ser así.
de un momento a otro la vida cambia, lo inesperado es que las personas lo hagan. a veces duele. Otras nos sirve de reflexión.
ResponderEliminarLa vida te la cambian en un minuto.
EliminarY con el tiempo encima quieren hacerte sentir incómodo.
Duele pero se olvidará.
Gracias JO!
Ay, es muy doloroso algo así. ¿Por qué tanto hielo donde hubo algo muy importante? No entiendo. Debe haber una razón fuerte y no lo que parece. Porque no se elimina a un gran amor de un día para otro. Por evitar un mayor sufrimiento, hay quienes prefieren escapar de quien aman.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es doloroso y cruel.
EliminarNo lo sé, cada persona es un mundo, y aunque creas conocerla, siempre hay zonas oscuras. Puede ser algo de lo que dices. ¿Quién sabe?
Un abrazo sara.
GENIAL!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarMuchas gracias!!!
EliminarPues si, comparto tu sensación y sentimiento. A veces es la cruda realidad,pero...como dice Carlos Perrotti y como se dice en Argentina: "duele, cualquiera sea la razón... pero de la que te salvaste, amigo, aunque no lo creas."
ResponderEliminarMuy acertado tu relato, como siempre haces de lo cotidiano literatura!
Un abrazo.
Son sentimientos y situaciones de lo más cotidiano, aunque no siempre se comparten. La mayoría así opinan, me libré.
EliminarMuchas gracias lunaroja.
Un abrazo.
Vaya...
ResponderEliminar¡¡Un abrazo¡¡
Pues sí...
Eliminar¡¡¡Un abrazo Amapola!!!
La próxima vez, si no pueden evitar el encuentro, ya solo les quedará en común el tiempo como tema de conversación.
ResponderEliminarQué bien lo has descrito.
Un abrazo.
Seguramente, aunque quizás lo mejor sea evitarlo.
EliminarMuchas gracias Chema.
Un abrazo.
Se siente un gran vacío cuando una amistad o una pareja deja de ser importante en tu vida y al mismo tiempo dejamos de ser lo que éramos en la suya, las personas van a vienen en nuestras vidas y es el transcurrir de la propia vida, el tiempo, lo que nos cambia a todos, para bien o para mal, pero es así.
ResponderEliminarUn abrazo!
Se te abre un boquete en el interior que ni te cuento.
EliminarNo te haces idea de que pueda darse tal situación.
Luego, una vez ocurrido, intentas seguir con tu vida e incluso ser amable, pero no siempre vale la pena.
Un abrazo Montse.
Oh Alfred lo has descrito muy bien, es muy triste y duro darse cuenta que ya no solo no es lo mismo sino que esa persona ya nada aporta y que toca seguir para adelante sin ella y que visto lo visto no valia la pena.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Conxita. No, empiezas a recapacitar y ha seguir solo con lo tuyo puesto.
EliminarYa no hay nada a compartir.
Un abrazo.
Qué bien expresado en ese final!!!...
ResponderEliminarSoy partidaria de que todo lo que se pueda hablar con la persona que en tu vida ha sido especial y tiene peso, se hable. Pero hay impedimentos por lo que no es posible y tú claramente has manifestado alguno.
Constatarlo es importante y cerrar la puerta aún más.
Un abrazo Alfred y buen día.
Gracias Ángela.
EliminarPiensas que podrás hablar de todo o casi de todo, pero se ve que no.
Para mí es simplemente un sentimiento de culpa o algo así, no lo sé.
La puerta se cerró y así se queda.
Un abrazo y feliz finde.
Lamentablemente suele suceder amigo Alfred, son temas que duelen pero no tenemos más remedio que ceñirnos a la cruda realidad. Cuando no existe comprensión por parte de uno sobra todo lo demás, y las palabras muchas veces calan y duelen. En ciertos casos lo mejor es olvidar.
ResponderEliminarUn abrazo y buena semana.
La realidad siempre se impone.
EliminarHay que coger los trastos y seguir tu propio camino.
Olvidar cuesta más que el decirlo.
Un abrazo y feliz finde.
En esos lapsos, hay toda una vida en común encerrada.
ResponderEliminarUn abrazo David.
Así pasa, a veces. Escribes de modo que veo la escena clarita, como una peli :)
ResponderEliminarLa vida nos depara este tipo de sorpresas.
EliminarGracias, es una descripción aséptica, la cosa no daba para más.
;)